Todo aquello que nace tiene un lugar donde se va meciendo y crece, donde pasar esas noches que luego alimentan el día. Para el sonido Madchester era The Haçienda. Ese lugar alimentaba sus sueños.
Pero antes de ser ese antiguo edificio de ladrillo rojo y fachada curva en el 11-13 de Whitworth Street con la calle Albion, en el lado sur del canal Rochdale, fue más. Un antiguo almacén, una tienda de un constructor de yates, una sala de cine de Bollywood e incluso una sala de exposiciones.
FAC51 abrió sus puertas el 21 de mayo de 1982 de la mano de Rob Gretton, el manager de Joy Division y New Order quienes, con Factory Records, financiaban el club. Y los propios New Order junto con Tony Wilson, directivos. El nombre The Haçienda fue añadido a FAC51 por un eslogan radical internacionalista: “La Hacienda se debe construir”.
El aspecto característico de fábrica del club fue gracias a Ben Kelly, uno de los mayores diseñadores de interiores británicos, recomendado directamente por Peter Saville. El edificio contaba con varias plantas: arriba, el escenario con la pista de baile, el guardarropa, el bar, un balcón y la cabina del dj. En la planta baja se encontraba el bar de copas The Gay Traitor, entre otros. Incluso llegó a tener un salón de peluquería.
En los inicios la música que podías escuchar en el club iba desde el indie hasta música disco, hip hop y electro. Y a los cuatro años de su nacimiento era el club más importante fuera de EEUU, con actuaciones de djs reputados pinchando durante toda la noche. Las sesiones denominadas Nude, que se hacían los viernes, impulsaron al club hacía la fama que se merecía, a llenar todas las noches y a generar multitud de ingresos. Esto hizo que otros clubs de la ciudad siguieran el camino de The Haçienda. Grupos como The Smiths o Madonna, retransmitida en Channel 4, llegaron a actuar en la sala. Directamente desde Ibiza llegaron las noches Hot, música house importada desde la isla que hacía llenar cada noche de locura la pista de baile.
Y el éxtasis llego a The Haçienda. En 1989 se produjo la primera muerte a causa de la droga en Reino Unido y tuvo lugar en el club. Esto marcó un antes y un después que les llevó a tener numerosos problemas de seguridad y con ello problemas con el Ayuntamiento de Manchester. Aquí tuvo lugar el primer cierre durante un breve periodo en 1991. Reabrieron para el aniversario de la sala. Durante los últimos años del club la falta de seguridad y las peleas eran constantes. Esto, sumado a los problemas financieros del mismo determinaron su cierre definitivo, ni siquiera el intento de compra del club por parte de algunas compañías pudo salvarlo. La última noche de Madchester en FAC51 The Haçienda fue el 28 de junio de 1997.
El club fue demolido en 2002 y con él los sueños madcunianos.